El ruido de ciudad en los cristales acabará por ser tu única música, y las cartas de amor que habrás guardado serán tu última literatura.
Editorial
JACQUES-LOUIS DAVID, LA MUERTE DE MARAT, 1793. MUSÉES ROYAUX DES BEAUX-ARTS DE BELGIQUE © ROYAL MUSEUMS OF FINE ARTS OF BELGIUM, BRUSSELS.
El ruido de ciudad en los cristales acabará por ser tu única música, y las cartas de amor que habrás guardado serán tu última literatura.
Editorial
A María Antonieta
Escribir en llamas. Epístolas, la lectura incombustible
El arte de escribir cartas
El cartero
A Carlos Pellicer
A Gabriela Mistral
Los epistolarios de Bernardo Ortiz de Montellano y una carta de T.S. Eliot
A Luis Cardoza y Aragón
Cenizas dispersas en el viento: el epistolario de Ángel Rama
A un pintor no identificado
“Te quise tanto al leerte”
A Elena Poniatowska
En el agua lustral de Eugenio Montejo
A Juan Antonio Ribeyro
A Plinio Apuleyo Mendoza
La carta
[Zozobra; lenguaje: informal]
La prueba de un amigo
Carta abierta al hombre de mis sueños
La elegancia soberana de no pretender nada
Carta abierta
Le parece que fue “Volver”
J. usa el chat con R. para hacer la lista del súper
El sello creativo: el arte correo en México
A la ballena que fue el esqueleto en el Museo de Historia Natural de Xalapa
Martha Hellion y el arte correo
Luis García Montero: el poeta y el tiempo
Neal Cassady: artífice de la generación beat
Oráculo manual del sobreviviente
La razón disruptiva, de Luis Villoro
Antártida, de Fabián Espejel
Antología narrativa, de Ámparo Dávila
Carlos Martínez Rivas: la insurrección como ars poetica
Bonus Tracks
Cartas evolutivas
Textos íntimos, archivos y correspondencia
Tras la pista del jade, cartas en la historia
El medio es el mensaje
Te quise tanto al leerte