En este ensayo Jacques Soustelle espera mostrar las características del arte precolombino que lo convierten en patrimonio artístico de la humanidad, un arte que afianza la relación del hombre con lo divino. Compara el arte olmeca con el maya y el azteca, diserta sobre las formas (escultura, pintura, orfebrería) que estos grupos étnicos emplearon para expresarse.