"Desde el surgimiento de los canales privados en la televisión española, los contenidos comunicativos ofrecidos a las audiencias han alcanzado unos niveles de banalidad, estereotipia, cursilería y degradación intelectual nunca antes vistos", asegura Olivia Velarde Hermida quien basó su estudio en el exhaustivo análisis de 74 programas emitidos durante un trimestre.