En este vasto ensayo, Myrna Soto ofrece primero una definición del "manierismo", esa nueva corriente estética del siglo XVI, que imponía al pintor poses poco naturales, pero susceptibles de suscitar emociones. Luego habla de uno de lo más artistas más significativos de esta escuela: Doménikos Theotokópoulos, El Greco.