dossier Comunidad NOV.2023

Tras cortinas de nervios y mareos

Juan Carlos Bautista

Tras cortinas de nervios y mareos,

​ catedral hundida en su sueño

​ entre onirias agazapadas,

​ estaba el Marrakech.

Las rocolas echaban a volar sus cuervos

​ y las locas,

​ de risas lentejuelas,

empapaban el aire de miradas.

Las liosas, las dulces,

​ las tibias, las acedas:

nacidas de su amor asustadizo

y del husmo triste de la sodomía.

Con sus gestos como puños

y las manos llenas de fervor, ladraban:

​ Vírgenes verriondas

de tardes en declive y noches sin tregua,

tendidas bajo el sol bajuno de las lámparas.

En el Marrakech eran soberanas,

cerraban las piernas como señoritas

​ y reían como putas.

Oscuras y alegres como algo que va a morir.

Ellas,

las sin vértice,

con el vinagre siempre en la lengua

​ y la sed

​ y el ardor de esa sed.

Iban al Marrakech exhalando olor de puertos

y ciudades de noche.

Reinas amarillas,

​ amoratadas,

​ subidas de color.

Reinas de melancólico fumar

que oteaban descaradas el pez de los hombres,

tras pestañas egipcias y dolencias abisinias.

Henchidas de presentimientos,

fieles a su embuste,

​ ligeras y estridentes como plumas,

paseaban su odio, su ternura,

su culo espléndido,

​ entre el azar de las mesas,

girando con el hábito furioso del insecto.

Iban al Marrakech y lo llamaban alegremente:

El Garra.

El Garrakech o el Marranech.

Hechizadas con ese nombre crispado y su conjuro.

—Vamos al Garra, querida.

Hay una loca que da vueltas.

Hay una bicicleta que camina sola.

Hay un hombre que se hinca frente a una verga

como frente a una cruz.

Hay esfínteres que son grandes oradores.

Hay un cábula lamiéndose las ínfulas.

Hay un gandul con la garganta a media furia.

Hay un niño con los ojos cerrados.

Hay paredes pasándose de verdes.

Hay una loca que camina sola,

como una bicicleta sola,

tan sola que da miedo.

—Vamos al Marranech, queriiida.

Y las nalgas se inflaban.

Y los culos se abrían como boquitas.

Poema del libro Cantar del Marrakech, editado por primera vez en 1993 por el Fondo Editorial Tierra Adentro. Su más reciente edición la hizo la editorial española Frac de Medusas en 2016.

Imagen de portada: Imagen de las redes sociales del Salón Marrakech